Por @carolinaortizjerez
Las últimas semanas de la moda de París (enero y marzo de 2023), han sido el escenario escogido por María Abdala Zolezzi, creadora de la marca argentina de tejidos MAYDI, para presentar su última colección otoño-invierno23-24 a los compradores internacionales.
En una industria en la que la rapidez de la producción está a la orden del día, MAYDI propone una pausa. Su marca de tejidos se basa en el trabajo lento y en la valoración por lo hecho a mano. Es por ello que recibe a sus clientes extranjeros en un showroom silencioso, alejado del bullicio de las pasarelas y en el que quienes lo visitan, pueden disfrutar con calma de cada una de sus propuestas.
Después de estudiar en Londres y de trabajar por más de 12 años en la industria de la moda en París, María Abdala Zolezzi o Maydi regresó a Argentina en el año 2014, con el fin de crear su marca. Su pasión por lo hecho a mano la acercó hacia el mundo del tejido y junto con ello, a las técnicas ancestrales vinculadas con la fibra de lana.
La mayoría de las fibras utilizadas en su colección otoño-invierno 2023 son hechas con lana merino proveniente de Península de Valdés, Argentina. Además cuenta con piezas elaboradas con lana de alpaca, lana cruda, mohair, de vicuña y de guanaco, siendo estas dos últimas, unas de las más escasas debido a que se trata de animales salvajes.
Para MAYDI, la sostenibilidad y la protección del medio son elementos fundamentales a tener en cuenta al momento de acceder a las materias primas. Es por ello que las fibras utilizadas en sus colecciones cuentan con certificaciones Wildlife friendly © (amigables con la vida salvaje), que le permiten no sólo mostrar que los animales son tratados con la dignidad que merecen, sino que además, el proceso de producción de las fibras también permite mantener las tradiciones ancestrales de las comunidades de ganaderos establecidas tanto en el sur como en el norte de Argentina.
Otra de las características de la marca es que “todo está hecho a mano y se usan tres técnicas tradicionales como el crochet, tejido con dos agujas y telares a mano, dependiendo de las piezas.” Cada artesana/o trabaja desde su domicilio, con el fin de asegurar sus condiciones de vida y el valor de las prendas es fijado por ellas/os.
Gracias a sus diseños innovadores y al uso de fibras de gran calidad, MAYDI ha logrado abrirse paso en mercados tan exigentes como el japonés, país en el que cuenta con unos 15 puntos de venta.
La colección otoño-invierno 2023 de MAYDI cuenta con unos 40 piezas, cada una de las cuales es hecha a pedido y ajustada a las necesidades de cada persona, con el fin de asegurar una producción razonada y que evita la generación de stocks.