Por: Camila Rua
La industria de la moda sostenible está en constante construcción, por lo que, en muchas ocasiones, al intentar ingresar o transicionar hacia la sostenibilidad, se desconocen los problemas y retos que atraviesa la industria. Para conocer más acerca de estas dificultades, le preguntamos a Valentina Suárez, líder de Universo MOLA, el movimiento internacional de moda sostenible latinoamericana que trabaja por generar alternativas para un desarrollo transformador.
Cuáles consideras que son los tres mayores retos que enfrenta la industria de la moda sostenible en Latinoamérica en este momento?
Los tres mayores retos que enfrenta la industria de la moda sostenible en América Latina son el mercado, las políticas públicas y la conexión dentro del sector. Con este último, me refiero a que todos los actores de cada uno de los eslabones de la cadena de valor comprendan la sostenibilidad y la puedan aplicar, desde la producción hasta el diseño. El segundo reto son las políticas públicas, ya que necesitamos regulaciones más sostenibles y regenerativas. El reto relacionado con los mercados se centra en que necesitamos encontrar la manera de educar al consumidor final para que realice compras más conscientes y, de esta manera, podamos apoyar proyectos enfocados en la sostenibilidad.
¿Consideras que las marcas y los diferentes participantes en la cadena de producción deben aportar en la educación del consumidor?
Cada uno de los eslabones que forman parte de la industria es importante en todo sentido; por lo tanto, necesitamos que los productores tengan prácticas sostenibles para que comerciantes, diseñadores y consumidores también tengan y generen esas prácticas, porque si solo nos quedamos con una parte de la cadena, no lograremos que todo el sistema sea sostenible y, por ende, el producto tampoco lo sea realmente. Entonces, es sumamente importante que cada una de las partes que integran la cadena de valor pueda contribuir a ese proceso de sostenibilidad, ya que todos somos responsables de que el sistema cambie y se transforme.
¿Cómo crees que deben aportar a la educación del consumidor?
Se debe realizar una revisión de cada uno de los modelos de negocio de cada empresa y proveedores del mundo, para posteriormente comunicar, certificar y trabajar con sus clientes inmediatos. Claramente, quienes están en la cadena de producción no se dirigirán al consumidor final, sino a sus clientes, a sus stakeholders. Entonces, desde ese lado es súper importante ese proceso de comunicación.
De acuerdo con tu experiencia, ¿cuáles son los retos principales que enfrentan las marcas latinoamericanas al implementar procesos sostenibles?
Muchas veces el mayor reto para implementar prácticas sostenibles es la educación, ya que muchas personas están desinformadas sobre qué cosas deberían tener en cuenta para ser más sostenibles. Las personas piensan que con solo conseguir textiles reciclados o naturales basta y en realidad es solo una punta muy chiquita de un enorme iceberg. Entonces, necesitamos que los proyectos y todos los profesionales que posibilitan que estos salgan adelante conozcan realmente qué significa la sostenibilidad, cómo hacer para medir los impactos que tenemos y potencializar los recursos que tienen en la mano.
¿Con qué metodología las marcas podrían darles solución a estos retos?
Nosotros, a través de MOLA Educa, generamos diferentes cursos y espacios de formación desde 2019, justamente para educar al profesional del futuro. Algo muy importante es que brindamos información actualizada y herramientas metodológicas, como modelos de negocio de impacto, comunicación o mercadeo, para todas las iniciativas que tienen una impronta y un propósito distinto al de una empresa de fast fashion basada en el producto. Normalmente, estas empresas están focalizadas en potenciar su propuesta de valor a través de un producto holístico, que consiste en: el producto, la historia, el porqué y el propósito.
Sin embargo, una habilidad importantísima es el análisis crítico, el poder discernir y entender si realmente se está siendo coherente o si solamente se están generando estrategias de greenwashing que son periféricas y reactivas, en vez de ser proactivas.
La sostenibilidad está compuesta por tres ámbitos principales: el medioambiental, el social y el económico. ¿Con cuál de estos tres ámbitos suelen tener mayores dificultades las empresas?
Yo creo que el ámbito con el que más «luchan» las marcas, por así decirlo, es el económico. Tenemos marcas que son muy sociales y muy enfocadas al bien de las comunidades, entendiendo por comunidades como cualquier colectivo. También tenemos marcas que están enfocadas en lo ambiental, entonces, todos los procesos de minimización de impactos del agua, la energía, etc., están muy bien. Pero, cuando llega el momento de implementar finanzas sostenibles, ahí tenemos falencias, y esto viene justamente del modelo de negocio y de las estrategias de mercadeo.
¿Cómo hacer unas finanzas sostenibles?¿Y qué deben incluir una finanzas sostenibles?
Si bien no soy experta en finanzas, sí me especializo un poco más en modelos de negocio. Por lo tanto, la innovación es sumamente importante para encontrar canales de distribución y generar modelos de negocio diferenciadores, que generen menos costos, mayor impacto y tengan un rendimiento económico. No hay una fórmula exacta de cómo hacer esto, pero es fundamental tener muy clara la comunicación y el mercadeo de nuestros productos, y entender que la sostenibilidad no está reñida con la estética. En este sentido, la sostenibilidad también debe apuntar a generar productos que valgan la pena y sean atractivos para las personas.
¿Cuál es la mejor manera de afrontar estas dificultades?
Creo que la mejor manera es justamente dejarse guiar por mentores, aprender de quienes ya conocen el ecosistema en Latinoamérica. Siento que Mola Educa es un espacio maravilloso para aprender, cometer errores, hacer preguntas y resolver dudas. Entonces, creo que hay que invertir en educación, tiempo, conocimiento, asistir a eventos, generar espacios de networking, darse a conocer, buscar estrategias para entender hacia dónde vamos y cómo podemos ser más sostenibles desde el corazón de nuestros negocios y profesiones.
Por último, ¿qué papel juega la conexión y el networking en la sostenibilidad?
La sostenibilidad y los procesos relacionados con ella, en los últimos años, han sido un proceso constante; no hay nada escrito, detallado o afirmado, y muchas cosas están en constante evolución. Por lo tanto, es muy importante generar espacios de networking y educación para estar actualizados y generar un pensamiento crítico alrededor del mismo. Si no nos conectamos, no aprendemos y no generamos alianzas con otros, no podremos entender la actualidad de lo que está pasando y nos quedaremos en una burbuja que no nos va a llevar a nada, porque estamos trabajando en una industria que abarca temas humanos de sociología, filosofía, física, etc. Por lo tanto, es muy importante estar en contacto con todos los sectores y entender otras perspectivas.