Escrito por Fernanda Perera @wearecoral

 

El «lujo silencioso» y el «slow fashion» son dos conceptos relacionados que reflejan una tendencia en la moda hacia un enfoque más consciente y sostenible. 

El lujo silencioso se centra en la calidad, la artesanía y la durabilidad en lugar de la ostentación y el lujo llamativo. Las marcas que siguen este enfoque priorizan la creación de prendas atemporales y de alta calidad que no siguen las tendencias efímeras. Asimismo, promueve un estilo elegante y refinado, pero sin necesidad de logotipos ostentosos o elementos llamativos. 

Por otro lado, el slow fashion es un movimiento que busca reducir el impacto ambiental de la industria de la moda. Se enfoca en la producción de ropa de manera ética y sostenible, fomentando la calidad sobre la cantidad. Las marcas de slow fashion se preocupan por condiciones laborales justas, materiales sostenibles y procesos de fabricación responsables. 

Ambos conceptos promueven un enfoque más consciente y ético en la moda, que valora la calidad sobre la cantidad y aboga por un estilo de vida más sostenible.

En referencia al estilo de vida el concepto de «lujo silencioso» se refiere a la idea de vivir lujosamente de una manera discreta y sin ostentación. En América Latina, hay varias opciones para experimentar este tipo de lujo en destinos exclusivos, como Punta del Este en Uruguay, la región vinícola de Mendoza en Argentina, o ciertos resorts de la Riviera Maya en México. Estos lugares ofrecen experiencias de alta calidad, pero sin la ostentación típica de destinos de lujo más tradicionales.

Este término hace referencia a la forma en la que se venden las marcas de alta gama que no tienen nada que ver con los diseños o tendencias de moda, pues una de sus características es ser sencillas y simples, pero eso sí, hechas con los productos de más alta calidad. Esta forma de vestir, casual y cómoda, también responde al minimalismo. Esta tendencia artística se basa en usar únicamente lo más esencial y aunque hemos visto que se usa para la decoración del hogar, diseño, arquitectura y arte, la ropa también se vio influenciada.

Mark Zuckerberg y Steve Jobs son referentes masculinos de esta tendencia. Mark Zuckerberg con sus ya conocidas y “sencillas» playeras de la marca Brunello Cuccinelli. Su negocio de tiene su sede en Solomeo, un pequeño pueblo ubicado en la región italiana de Umbría y sus empleados hablan con cariño del diseñador por las condiciones laborales con las que cuentan, pagados con un mejor salario que el del promedio de los trabajadores, alimentados con comidas abundantes y con jornadas laborales que incluyen siestas autorizadas. Así, esta marca ha logrado figurar como una de las más representativas de esta tendencia.

Y si hablamos de lujo silencioso femenino Katie Holmes sería una de las mayores referentes. Con este twinset de cashmere, de la marca Khaite demuestra que prefiere ir por lo caro y atemporal, y no unirse al «último grito de la moda». Prendas duraderas y atemporales terminarían siendo una mejor inversión a largo plazo, además de una forma de respetar el medio ambiente y optar por firmas con condiciones laborales óptimas.

¿Y cuál es el futuro del lujo silencioso?

Hablamos de un enfoque discreto y minimalista de la vida de lujo, donde la ostentación es reemplazada por la calidad, la artesanía y la sencillez. El futuro de esta tendencia incluiría:

  1. Sostenibilidad: El lujo silencioso podría enfocarse aún más en la sostenibilidad, utilizando materiales y procesos de fabricación respetuosos con el medio ambiente. 
  2. Experiencias significativas: En lugar de bienes materiales, podría centrarse en la creación de experiencias significativas, como viajes personalizados, retiros espirituales o actividades culturales. 
  3. Tecnología discreta: La integración de tecnología avanzada de manera discreta en productos y servicios de lujo podría ser una característica del futuro del lujo silencioso. 
  4. Minimalismo: La simplicidad y el minimalismo en el diseño de productos y espacios podrían ser aún más valorados en el futuro. 
  5. Énfasis en la autenticidad: La autenticidad y la transparencia en la procedencia de los productos y la ética de las marcas podrían se

    r factores clave. 

Es decir que, el futuro del lujo silencioso podría girar en torno a la sostenibilidad, la calidad, la experiencia y la autenticidad, en contraposición a la ostentación y la opulencia.