Escrito por: Noticias de Universo MOLA

Por Lina Bermeo, Melisa Moreu, Camila Hermida, Diana Avellaneda, Angela Sarmiento, Catalina Noreña y Mónica Escobar – Voces del #UniversoMOLA Colombia

El 8 de Marzo  día internacional, en el que conmemoramos historias de lucha, entrega y crecimiento para el género femenino como construcción personal y colectiva; el género femenino en toda su extensión sin distinción de credo, raza, sexo, convicción;  género que por décadas ha alzado su voz para reclamar desde sus derechos más fundamentales hasta igualdad y participación activa en una sociedad que les ha mantenido al margen de las decisiones y resoluciones en varios espacios. 

Quienes hacen parte de toda la cadena de valor de la industria textil y de confección en ocasiones se desentienden de los sucesos  frívolos y esclavistas, con pocos sentidos antropológicos y sociales que envuelven a la moda, este ámbito no ha sido la excepción en tema de luchas feministas, ya han transcurrido 108 años del incendio en la fábrica textil Triangle Waist Co. de Nueva York el 25 de marzo de 1911 la cual representó hasta ese momento la mayor tragedia en la industria textil, fallecieron alrededor 146 personas de ellas 123 mujeres y la mayoría migrantes de Europa,  le siguió la tragedia del  24 de abril de 2013 durante el colapso del edificio Rana Plaza, suceso que removió  de nuevo el corazón  de la moda;  más de 1.000 personas perdieron la vida y más de 2.000 resultaron heridas en Bangladesh , allí donde se confeccionan la gran mayoría de prendas de moda rápida que se consumen en el mundo y donde se gestan factores de inequidad, injusticia laboral y esclavitud en torno a esta industria impulsada por mujeres.

Algunos datos exactos nos demuestran que en la industria Textil y de Confección se emplean a 1 de cada 6 personas en el mundo, y que el 80% son mujeres,  Asia es el continente que concentra el 60% de maquilas que manufacturan para las grandes marcas internacionales; quienes llegan a tercerizar allí sus procesos aprovechando las bajas condiciones de sindicalización, salarios irrisorios y no regulados por las autoridades. Algunas marcas a pesar de sus discursos de responsabilidad social y sostenibilidad, no invierten  como deberían un gran  porcentaje de sus millonarias ventas alrededor del mundo, a generar espacios laborales equitativos, justos, responsables y dignos  para quienes están sentadas detrás de sus máquinas y aún no lo hacen.

En el año 2018 el movimiento 8M convocado a través de redes sociales, por organizaciones feministas y aliados de la lucha  de los derechos de las mujeres en el que se adhirieron colectivos, agrupaciones y mujeres de más de 170 países , alzando la voz al unísono en pro de los derechos femeninos, este fue un escenario propicio para que las trabajadoras y textileras salieran a marchar en contra del acoso en las fábricas, la discriminación, la inequidad de salarios, la contratación informal, las condiciones indignas, aprovecharon para llamar la atención de grandes industrias y marcas para que regulen sus prácticas y a los consumidores a que se sumen a sus manifestaciones por igualdad de derechos y apoyen mediante sus compras aquellas que cumplan con certificaciones de comercio justo y respeto laboral.

Tanto las marcas como los consumidores necesitan reevaluar la importancia de las historias que cuentan las prendas.

El impacto negativo ambiental y social está siendo muy alto para el planeta, la sociedad que se ven afectados de manera acelerada.

Las mujeres como ser único o también como parte de un colectivo fortalecido, gracias a todas estas manifestaciones históricas que les anteceden, tienen ahora la oportunidad y la responsabilidad de mirar hacia adentro , de ser quienes quieran ser, preguntarse qué y porque usar, de indagar, escoger e interiorizar para conectarse con su entorno;  es ahora cuando tienen  el poder y la decisión de ser más conscientes y desde esa conciencia aportar con sus decisiones de compra, y uso. El apoyo debe ser decidido hacia las otras mujeres que tejen y entretejen no solo las prendas que usamos si no la sociedad que les ha visto luchar y crecer.

Mujeres a seguir tejiendo sociedad, conciencia, sostenibilidad, decidir y decir #NoFastFashion preguntarse #QuiénHizoMiRopa son los principios básicos para llegar a una #ModaSostenible consiente y equilibrada.